ESTO HA COMENZADO

Definitivamente esto ha comenzado. Ser Au Pair no es la paliza que muchos piensan cuando se lo cuentas, pero tampoco son las vacaciones pagadas que también ¡(oh ironías de la vida!) otros piensan. Esto es un trabajo, esto quiere decir, responsabilidades y horarios, como cualquier otro, pero uno satisfactorio, tanto por lo que aprendes del nuevo país y su cultura como por estar con niños. Esto último de los niños no todo el mundo lo compartirá, lo entiendo, no todo el mundo está preparado para esto, o simplemente no le gusta. Pero a mí personalmente con ESTOS niños me encanta. Decir que me gustan los niños es como decir que me gustan las personas, no me gustan las personas, solo las buenas, lo mismo me pasa con los niños.

Mis tres primero días han sido duros, en el sentido de una completa falta de energía tras el viaje tan agotador que tuve. La verdad es que he tenido mucha suerte de que la anterior Au Pair (Giulia se leggi questo voglio dirti che non potrò mai ringraziarvi abbastanza. Grazie mille) que ahora ya sabéis que es italiana, todavía estaba dos días más antes de viajar de vuelta a su casa por lo que me pudo enseñar TODO antes de irse. Ese todo incluye desde la casa, la rutina de los niños, las cuestiones especiales, la ciudad, sus amigos, TODO. Por lo que no tuve ni un segundo para descansar en 48 horas. Realmente fue muy útil y muy amable pero fue demasiado agotador.

La rutina diaria no es demasiado agotadora, me levanto temprano, vacío el lavaplatos que la madre pone por la noche con toda la cubertería del día anterior (no, aquí no se friega nada), coloco la cubertería, hago el desayuno y levanto a los niños si no se han levantado solos. Terminan, se visten solos y los llevo al colegio. Luego vuelvo, pongo la lavadora, la secadora y mientras recojo las habitaciones, no mucho, solo colocar un poco, los niños suelen dejarlo todo bastante bien. Cuando la lavadora termina meto las cosas en la secadora y tengo otro ratito para hacer lo que quiera. Una vez termina la secadora, tiendo la ropa y plancho la que necesite plancharse. Es solo la ropa de los niños por lo que es pequeña y se hace enseguida, solo la ropa del día anterior. Luego tengo que hacer de comer, puedo hacerlo por la mañana o justo antes de ir a buscar a los niños a las 5pm por lo que puedo elegir. Finalmente los voy a recoger, les doy la cena (sí, a las 6), los mando a la ducha y una vez se hayan duchado acaba mi día, es decir entre las 7pm y las 8pm depende de mi efectividad. 

Mi primer día terminó yéndome a la cama a las 9 de la noche, y el segundo llevando a la au pair al aeropuerto (con sus amigos, yo no conducía) y volviendo a la 1 de la mañana para empezar a las 6:30 otra vez, pero creo que se lo debía, ella al ser sus últimos días podría haberse dedicado a disfrutar y a pasar de mí.

Creo que necesito otro café, esto ha comenzado.